Capitulo uno.

 "Adela tu padre está muerto"

La muerte de mi padre era algo que yo,  ya había previsto.

Después de dos meces de sufrir por la muerte de mamá, él se rindio muy rapido  y nunca pudo recuperarse.

Mamá perdió la vida por culpa del cáncer, papá se dio un tiro en la cabeza, y me había dejado sola. Como yo soy menor de edad y no puedo disponer de los bienes que mi padre me dejo, es probable que mi tio acceda a cuidar de mi hasta que tenga dieciocho años.

Mi nombre es Adela Trümper tengo catorce años y como acabo de contarles mis padres están muertos. Ahora mismo me encuentro con galletas que es mi perro de raza pastor alemán, sentada abrazando mis rodillas tratando de llorar sin éxito alguno. Galletas me da lengüetazos en la mejilla y lloraba, el sabe  estoy triste y es algo que a él no le gusta. También se acurruca conmigo, y esperamos a que mi tío saliera de hablar con la trabajadora social, estaban decidiendo mi destino. No se o no recuerdo cuanto tiempo ha pasado desde que llegue a trabajo social, mi padre murio el jueves en la noche, y despues de llamar a emergencias me trajeron aqui.  Mi tio llego tres dias despues, se hizo un pequeño funeral y mi padre fue enterrado a lado de mi madre. Pero mi tio aun tenia que tratar los asuntos legales de mi padre y pase otra noche aqui, probablemente dos.

—¿Lista para irnos? Tu tía Simone te espera con ansias.—Mi cabeza procesaba con lentitud sus palabras—Además tú y Bill serán buenos amigos, iras a la escuela con él y te divertirás.—Me ofreció su mano yo la tome y me ayudo a ponerme de pie.

Me mudare a casa de mi tío. El esta casado con Simone y tienen un hijo. Bill, he hablado con él
por correo pero no lo conozco del todo bien, solo se que es muy simpatico, no me preocupa dejar mi vida en Berlín, porque no
tengo muchas amigas y amigos. Lo que me preocupaba es que seré la chica nueva en la escuela en la colonia y en la ciudad, era muy tímida y si me costaría hacer amigos. En la escuela aún más.

—Llegamos. —Anuncio mi tío cuando se estaciono enfrente de su casa, la puerta se abrió y apareció mi tía, una mujer hermosa y con mucho porte. Abro la puerta y tomo la correa de galletas, ambos salimos del automóvil y caminamos hasta la entrada mi tío baja mis maletas

—Dile a Bill que me ayude.—Mi tía habla a Bill y por la puerta se asoma  un chico delgado alto y muy lindo. En tanto ella se acercó a mí y me dio un abrazo.

—Qué bueno que ya llegaste, te prepare una habitación. Y quiero que me hagas saber si necesitas algo.

—Gracias—Le digo y entramos a la casa. 

Mi tia camina conmigo y me enseña mi habitación, me ayuda a desempacar e incluso me lleva la cena a mi habitación. Toda aquella atención hace que me sienta un poco extraña, si bien la relación con mis padre no era lejana tampoco era tan cercana. Debido al trabjo de mi padre y mi madre, aprendi a ser autosuficiente desde muy temprana edad.

Al día siguiente me siento un poco incomoda a la hora del desayuno, aunque consigo ocultarlo.

—El lunes empezaras a asistir a la escuela, ya me encargue de hablar con la directora, como tienes excelentes calificaciones te aceptaron y creo que iras en el salón de Bill.

—Hijo quiero que cuides mucho a tu prima, que le hables de la escuela y de todo.

—No te preocupes papá, Adela y yo nos llevaremos bien—.Bill me sonrié y yo le devuelvo la sonrisa. Pero mi tió se detiene a observar mejor a su hijo.

—¿Qué te ocurrió en la cara? ¿Fue Tom?

—Eh...—Lo examino mejor y entonces veo el moretón de su mentón.

—Ya te dije que si ese chico te sigue molestando, golpéalo para que vea que contigo no puede
jugar.

—Papá yo no apoyo a la violencia.

—Pero ese que tampoco quieres que yo hable con la directora, Tom Kaulitz piensa que por ser hijo de un hombre adinerado tiene derecho a golpear a los demas.

—De acuerdo le pondré un alto.

Mi tió lo mira con mucho recelo pero parece conformarce.

Lo malo de ser la nueva es que las clases ya estaba muy avanzadas. Tampoco me importa, siempre he  tenido un alma nerd que habia herdado de mi padre por lo que materias como química, física, matemáticas y todas esas materias molestas eran divertidas y las más fáciles para mí. Así que no creo que exista problema con ese tema. El verdadero problema es el tema de los amigos. Me mucha ansiedad cuando se trata de hacer amigos, y de la convivencia social.

Mi tió nos anima a ir de paseo, a que me distraiga. Así que por la tarde Bill y yo salimos a dar un paseo y aprovecho para preguntarle acerca de la escuela.

—Dime que es lo que tengo que saber de la escuela.

—La escuela en donde voy es como todas lo más importante es la supervivencia, el más fuerte manda.

—Y supongo que en la escuela el más fuerte es ese chico Tom, el que te hizo eso.—Toco con cuidado el moretón, él se quejá.

—Perdón.

—No importa. Y si Tom Kaulitz es el más fuerte en la escuela.

—Pero no entiendo porque no lo golpeas igual, alguien le debe de dar su merecido a ese chico.

—Nadie se atreve.

—Algún día alguien lo hara.

—Pero no seré yo.

—Como sea, ¿Qué más debo de saber?

—Tambien esta el grupo de las populares, los deportistas, ya sabes la tipica jerarquia social de las escuelas.

—¿Y a que grupo perteces tú?

—En el de los nerds, tambien al de los músicos.

Era muy probable que tambien formara parte del club de los nerds, quiza pueda unirme a algun club de deportes para acumular mas puntos y tener mejores notas. Aunque eso lo checaría el lunes.

Por el momento solo queria llegar a la casa y meterme a la cama. Me gustaria llorar la muerte de mis padre pero no podía, nisiquiera pude llorar la mañana que encontre a papá muerto en su despacho de la casa. Sentia un gran peso, pero no podiá liberalo

                                                                                                           ~

Es lunes me levante muy temprano, después de bañarme me vesto con el nuevo uniforme que estaba compuesto por una falda de tablones color azul marino, en conjunto con una blusa de manga larga y un chaleco que lo remataba con una corbata, zapatos negros y calcetas blancas.

Nunca pensé verme así de ridícula pero, ahora mismo me veía así, ridícula. Mi tía cepilla mi larga y roja cabellera.

—Baja a desayunar. Tu tío los llevara a la escuela.—Tomo la mochila que esta en la cama y después de darle un beso a galletas bajo.

Desayuno un poco de fruta con yogurt. No me gusta comer muy pesado en las mañanas. Bill me mira y me  sonrié. 

—¿Ya están listos?-Bill se  lleva la mochila a los hombros y yo lo imito. Es el primer día para mí y
me siento un poco nerviosa, por lo que me ha contado Bill, he deducido que me costara integrarme. Aunque probablemente estando ahí los nervios y la ansiedad se esfumen. —¿Estas lista?-Asiento y camino a lado de mi tío hasta la dirección. 

Bill se va directo a su salón de clases.

—¿Ella es Adela?

—Sí, ella es Adela, y creo que está más que lista para su primer día de clases. —Una señora de edad avanzada me sonrié y me entrego una hoja.

—Espero que te valla bien, las clases están avanzadas pero por tu historial académico de tu otra escuela, veo que será fácil para ti. Te llevare a tu salón.

—Adela...espero que te valla bien, cualquier cosa Bill está ahí. No dudes en preguntarle.

—No te preocupes tío, estaré bien.—Sonrió para tranquilizarlo se inclina y me dio un beso en la
frente.

Camino junto con la mujer por el largo pasillo, en los cuales ya no hay nadie probablemente todos estan tomando su primera clase. La mujer se detiene frente a una puerta y la toca un par de veces, hasta que una mujer alta y de tez morena aparecé.

—¿Ella es la nueva?

—Te la encargo.—La mujer me sonrié para darme animos y se va dejandome con esta nueva mujer.

—¿Tú eres Adela?—Revisa la lista—La prima de Bill.—Asiento—Pasa para que tomes la clase.

Cuando entro todo el salón se queda en silencio, pero solo por un instante porque imediatamente todos empiezan a hablar muy bajito. Me pongo un poco más nerviosa que antes pero localizo a Bill que esta sentado en la primera silla de la primera fila, a lado de otro chico.—Quiero que me presten atención, antes de empezar la clase, hoy una nueva chica se
incorpora, quiero que te presentes diles tu nombre a tus compañeros.

Camino hasta quedar de frente a todos.

—Buenos días. Mi nombre es Adela. Tengo dieciseis años y soy de Berlín.

—Espero que la traten bien y la hagan sentirse en casa. Y Adela tú te sentaras...-La maestra examina el salón y apuntala última fila, en el último pupitre se encontraba un chico-Te sentaras a lado de Kaulitz-Cuando camino  para llegar hasta el lugar, puedo sentir  muchos ojos clavados en mí. Pero no le doy importancia porque eso solo me hara sentir mas nervisa de lo que ya estoy. El chico se recorre a la silla que da a la ventana y yo me siento en la silla del pasillo.

Me dedico a ponerle atención a la clase de geometría. Era algo fácil calcular ángulos y todo eso, en la otra escuela iba más avanzada y para mí es pan comido, nadie ha acabado los ejercicios solo yo.

- ¿Alguien ya termino?-La maestro pregunta y yo alzo la mano-Muy bien Adela pasa al pizarrón y explícales a tus compañeros. -Camino hasta llegar al pizarrón y escucho muchos murmullos a
mis espaldas pero no les tomo importancia. Y resuelvo los ejercicios. -Muy bien pasa a tu lugar

Las siguientes clases trascurrieron normal, sin nada que mencionar. Cuando el descanso llega, camino con Bill hasta la cafetería.

—Él es Gustav. —El chico sonrió y tendió su mano para estrecharla

—Mucho gusto. Adela-Era él con el que Bill estaba sentado en la clase. Nos sentamos en una mesa levanto la vista de la bandeja de comida y noto como entra el chico con el que estaba sentada. Otros dos chicos lo acompañaban, uno muy rubio y delgado y el otro tiene el cabello castaño hasta los hombros y de los tres era el que mejor condición física tiene. Todos parecen notar su presencia muchos se escondén detrás de sus libretas y otros no.

Era de ese tipo de tío que se creé el soñado, el que siente que la tierra que pisa no lo merecía
y el típico sequito de seguidores. Bill se levantó y tomo su bandeja.

-Mejor nos vamos a otro lado. -Imito a ambos pero nos interceptan antes de poder avanzar.

-Trümper...durante toda la clase eh estado pensado en dejarte de molestar, pero claro solo si
me presentas a tu prima, ya me entere que esa pelirroja sexi es tu prima. -El idiota hablaba como si yo no estuviera. -Nena si supieras lo perdedor que es tu primo, tal vez te gustaría empezar a andar con nosotros. Soy Tom, él es Andy y el Georg-Señalo con la vista a cada uno.

-No me interesa en lo más mínimo. Ahora si nos disculpas, nos vamos. -Me mira un poco confundido.

-Creo que escuche mal.

-No escuchaste perfectamente bien. -Lo ignoro y cuando iba a pasar el empuja la bandeja de mi comida haciendo que esta se me cayera en mi uniforme. Todos los que lo presenciaron comenzaron a reír, y sentía que todas las lágrimas que no habían salido desde la muerte de mi padre, se me acumulaban en mis ojos. Pero también sentí coraje. Tanto que solo sentí como se cerraba mi puño, y cuando menos me lo espere, este ya estaba en la cara de Tom, emplee tanta fuerza,por el coraje que el cayó al piso. La cafetería se queda en silencio y empiezo a sentir las miradas en mi.No se qué hacer, mi mente  no reacciona. Quería moverme y salir huyendo de ahí. Pero mis piernas se habían dormido.